¿Cuántas veces a la semana es saludable comer huevo?
En los años 90 comer huevo entró en decadencia, conviertiendo al huevo en un alimento proscrito de la dieta. De pronto se convirtió en un peligro para la salud, parecía que era el precursor de la subida del colesterol.
Desde entonces hemos ido navegando por 2-3 huevos a la semana hasta hace unos años que se ha empezado a recuperar como un alimento completo y saludable.
Yo ahora empiezo a recomendar 4-5 yemas a la semana y claras libre.
Comer huevo sube el colesterol
El huevo contiene colesterol, cierto; pero el huevo contiene lecitina, esto impide que el colesterol del huevo no sea absorbido completamente.
Se admite ya, por la comunidad científica que el colesterol ingerido no está totalmente relacionado con el colesterol sérico.
Así como, que los huevos fortificados, aumentan el colesterol bueno (HDL) y mejora el perfil lipídico en algunas personas.
Comer huevo fortificados
Los huevos fortificados están enriquecidos con nutrientes adicionales, tales como vitaminas y minerales, para mejorar su valor nutricional.
Se consigue alimentando a las aves con granos fortificados, incorporando al huevo nutrientes adicionales, lo que permite que los nutrientes adicionales se incorporen a los huevos de manera natural.
Entre los nutrientes de este huevo podemos encontrar componentes bioactivos, vitaminas, minerales, ácidos grasos omega-3, y una proteína de muy alta calidad, algunos expertos llegan a decir que la mejor proteína sobre la tierra.
Mi opinión como dietista
Mi forma de entender la alimentación es hacerla lo mas variada posible, ya que cada alimento nos aporta importantes nutrientes, de los que no tenemos por qué prescindir.
Si empequeñecemos nuestro grupo de alimentos estaremos despreciando todo lo bueno que los desterrados nos pueden aportar.
Debemos de dejarnos llevar por nuestra vista cuando vamos a supermercado y tener una mente abierta a incorporar todo lo que tenemos a nuestro alcance.
Eso sí, es importante saber, cuándo, cómo y en que cantidades debemos tomarlos.
Ni debemos subir a los altares las propiedades de algún alimento en concreto, ni menospreciar todos aquellos beneficios que nos ofrece la rica dieta mediterránea.