¿Cómo influye la alimentación en tu pelo?
Dicen que la cara es la imagen del alma y es cierto; igual que tu pelo es el espejo donde se refleja lo que comes. Casi siempre que pensamos en la alimentación se nos viene a la cabeza adelgazar o engordar, sin embargo una buena alimentación es mucho más, y la carencia de vitaminas y minerales se reflejarán directamente en tu pelo.
Cuando el pelo se nos cae con facilidad, si no tiene brillo y nuestra melena no luce como la de las estrellas, lo primero que hacemos es ir a nuestro peluquero o peluquera y comprar productos y más productos para el cabello: champú, suavizante, bálsamo… y, sin embargo, no vemos demasiados cambios en nuestro pelo. Lo único que cambia es nuestro monedero, ya que estos productos son caros y en realidad poco efectivos. El auténtico problema de nuestro pelo está en nuestra alimentación. Párate un momento y piensa qué comes y, por supuesto, cómo comes.
¿Qué son los minerales para el pelo?
Los minerales son micronutrientes que nuestro metabolismo necesita para realizar su complejo proceso metabólico. La carencia de alguno de ellos se manifiesta en nuestro cuerpo de alguna u otra forma. Si tu pelo está apagado, mate, con poco cuerpo y se muestra débil y quebradizo, estoy segura que te falta alguna de estos minerales:
- Zinc: la carencia de este mineral se manifiesta en la disminución del grosor y la longitud del cabello. Junto con la vitamina B6 estás protegiendo a tu cabello de la caspa. Los signos son que pierde brillo y se vuelve débil y quebradizo. La deficiencia de zinc y vitamina B5 conduce a la pérdida de color del pelo. Los alimentos en los que puedes encontrar zinc son carnes magras, mariscos, huevo, germen de trigo y legumbres.
- Hierro: ayuda a fortalecer el cabello en grosor, por ende el signo de carencia de este mineral es la fragilidad y la debilidad. Puedes encontrar hierro en alimentos ricos en proteínas como carnes, hígado, cereales integrales, soja, lentejas y hortalizas de color verde oscuro.
- Azufre: es necesario para la formación de colágeno e indispensable en la producción de queratina, ambos responsables de la flexibilidad y resistencia del cabello. Este mineral ayuda a disminuir el engrasamiento del cabello y la piel. Lo encuentras en levadura de cerveza, soja, frutos secos, semillas, carnes, cereales integrales y huevo.
- Magnesio: es un mineral que se indica para el tratamiento del cabello frágil y la calvicie prematura. Lo encuentras en frutas secas, las semillas, los cereales integrales, las legumbres y las hortalizas de color verde intenso.
- Yodo: ayuda a mejorar el crecimiento del cabello y también de las uñas. Encuentras yodo en pescados y frutos de mar. Es recomendable consumirlo, al menos, 2 veces a la semana.
- Selenio: reduce la descamación en el cuero cabelludo.
- Cobre: proporciona buen color a tu cabello.