El salmorejo de cerezas es una forma deliciosa de llevar las sopas frías un paso más allá: mantiene la idea de crema fría con base vegetal, pero suma un matiz afrutado que lo hace especialmente refrescante. Es el tipo de receta que apetece cuando empiezan los días templados, cuando buscas algo ligero y con sabor, pero también quieres un plato vistoso para una comida con amigos.
Por qué preparar salmorejo de cerezas en primavera
En temporada, las cerezas aportan un punto dulce y aromático que combina muy bien con el perfil ácido del tomate y el toque de vinagre. El resultado es una crema fría con carácter, fácil de tomar y muy agradecida como primer plato. Además, es una opción estupenda para variar tu repertorio de “platos de cuchara” sin encender el horno ni complicarte con elaboraciones largas. Si te gusta este estilo, en la categoría de recetas de sopas puedes encontrar más ideas frescas para la temporada.
Cómo servir el salmorejo de cerezas para que quede perfecto
La gracia del salmorejo de cerezas está en dos cosas: temperatura y textura. Bien frío, resulta más elegante y equilibrado, y la sensación en boca es mucho más limpia. En cuanto a la textura, lo ideal es que quede cremosa y homogénea; si te gustan las cremas muy finas, el triturado a conciencia marca la diferencia. También es una receta perfecta para dejar lista con antelación, lo que la convierte en un acierto cuando quieres organizarte sin renunciar a comer bien. Para completar tu menú con propuestas igual de prácticas, puedes echar un vistazo a todas las recetas del blog y montar combinaciones rápidas.
Un plato fresco para menús más ligeros
Incorporar cremas frías a tus comidas es una estrategia sencilla para aumentar la presencia de verduras y fruta de temporada, con una preparación que suele sentar bien incluso cuando hace calor. Yo no se vosotros, pero para mi la cereza es una de las frutas mas bonitas y que más despiertan deseos irrefrenables de comerlas, tan pequeñas, con su color rojo intenso y además con gran contenido nutricional del que no debes prescindir.
- Ideal como primer plato en días templados o calurosos.
- Textura cremosa y sabor equilibrado entre dulce y ácido.
- Perfecto para preparar con antelación y servir bien frío.
Si te apetece una sopa fría diferente, rápida y con un punto especial, el salmorejo de cerezas se convierte en una receta de temporada que querrás repetir.
Ingredientes
Para 4 raciones (cantidades orientativas).-
350 g de cerezas
-
650 g de tomate
-
60 g de cebolla
-
60 g de pimiento rojo
-
40 g de pimiento verde
-
1 diente de ajo
-
30 g de vinagre de Jerez
-
50 g de aceite de oliva
-
5 g de sal
Preparación
Elige el método de cocinado.- Lava los tomates, retira el pedúnculo y córtalos en cuartos.
- Lava y deshuesa las cerezas; añádelas al bol con el tomate.
- Añade el diente de ajo pelado, la cebolla y los pimientos troceados.
- Incorpora sal, vinagre y aceite; tritura hasta obtener un puré fino.
- Sirve muy frío.
Versión Thermomix
- Lava los tomates y deshuesa las cerezas; colócalos en el vaso.
- Añade el ajo pelado, la cebolla y los pimientos troceados.
- Agrega sal y vinagre; tritura. 30 seg / vel 5
- Tritura de nuevo para alisar. 3 min / vel 10
- Añade el aceite y emulsiona. 2 seg / vel 7
- Opcional: cuela con el cestillo.
- Sirve muy frío.
Información nutricional
Valores aproximados por ración para 4 raciones.- Energía: 216 kcal
- Proteínas: 3 g
- Hidratos de carbono: 20 g
- Grasas: 13 g
- Fibra: 4 g
- Sal: 2.5 g
Consejos y variaciones
- Sírvelo **muy frío**: es como más destaca el contraste dulce–ácido del salmorejo de cerezas.
- Si lo quieres más fino, en la versión Thermomix puedes **colarlo con el cestillo** (opcional).
- Ajusta el punto al final: una pequeña corrección de **vinagre** o **sal** puede equilibrar mucho según la madurez de los tomates y las cerezas.
- Para una presentación más “de invitado”, sírvelo en cuencos individuales y termina con un hilo de aceite justo antes de llevar a la mesa (sin añadir ingredientes nuevos).