¿Por que es importante la hidratación para mejorar el rendimiento físico?
La hidratación es clave para un buen rendimiento deportivo.
Siempre hablamos de la importancia del agua, en este post quiero, por el contrario, detallar las graves consecuencias de la deshidratación durante la práctica deportiva:
- Menor rendimiento físico: Las condiciones climáticas o el sobreesfuerzo o la duración de la intensidad física, generan gran cantidad de calor que ha de ser liberada al exterior, es por eso que el metabolismo pone en marcha la evaporación, através de sudoracion, eleminando gran cantidad de agua al exterior que debe ser repuesta mediante la hidratación.
- Calambres y fatiga muscular: Es la consecuencia de no reponer el agua perdida mediante la sudoración ya que el cuerpo recurre en busca de agua cualquier órgano del cuerpo que se pueda encontrar como articulaciones, musculatura e incluso cerebro.
- Alteración del ritmo respiratorio
- Pérdida del conocimiento, si la temperatura es muy elevada.
Pautas de hidratación, objetivo: rendimiento físico deportivo.
1.- Beber antes de entrenar o competir:
- Momento clave, solemos pasarlo por alto. Debemos acostumbrarnos a beber sin sed, la sensación de sed, es un mecanismo de alarma que refleja nuestro estado de deshidratación.
«Bebe unos 300 ml. antes de comenzar la actividad física»
2.- Hidratar mientras entrenamos o durante la competición:
Para hidratar, mejor beber una buena cantidad de agua cada 25-30 minutos, que dar pequeños sorbos a cada instante.
Si el entrenamiento o competición es de larga duración (media maratón o triatlón) es recomendable usar bebidas isotónicas ricas en sales minerales y polímeros de glucosa como la maltodextrina, evitarán la aparición de calambres musculares y tendremos mejor rendimiento físico
3.- Hidratación completa tras el entrenamiento / post-competición:
Es imprescindible beber agua, inmediatamente después del entrenamiento, para bajar la temperatura y evitar la sensación de sed o deshidratación. Podemos hacer uso de las bebidas isotónicas.
Continuar bebiendo en las horas posteriores al ejercicio físico, son las horas en las que empezamos a hidratar verdaderamente.
El entrenamiento de alta intensidad, requiere de un aporte extra de hidratación.