¿Qué peligros acecha a una dieta en el verano?
Hacer dieta en el verano. Cada año al llegar estas fechas buscamos desesperadamente la forma de mantener el peso que, con esfuerzo y buen hacer, hemos conseguido en invierno.
Tentaciones que nos hacen saltarnos una dieta en el verano
- Mas horas de sol
- Mas salidas
- Chiringuitos con ricas tentaciones
- Mojitos y compañía
- Largas siestas y poca actividad física
- Descontrol en los horarios de comidas
En la playa los chiringuitos, en las ciudades sin playa, las terrazas.
Los oasis de verano en la ciudad son las terrazas, que se llenan a medio día, por la tarde y por la noche. Si eres una asidua de estos chiringuitos urbanos, también debes tener en cuenta estos consejos si no quieres ganar kilos como por arte de magia:
- Horchatas y granizados: Este tipo de bebidas, son muy azucarados, por lo que suelen dar sed, calma la sed con agua.
- Una alternativa es el té frío con limón, cerveza sola o con limón, refresco light y tinto de verano.
- Platitos de frutos secos: Es muy fácil comértelos enteros sin darte cuenta. Además, te darán tanta sed que pedirás más bebida (por eso te lo ponen gratis, recuerda que nadie da duros a pesetas)
- Sentarse para tomar copas: Siempre es una mala idea, no sólo porque contienen muchas calorías vacías (más de un 40% de azúcares) sino que además al estar quiet@ no se queman.
- Las copas sólo de noche, de pie, bailando y sólo una. No te olvides de que el aumento del consumo de bebidas alcohólicas en verano suele ser la causa del aumento de peso.
- Pasa de los zumos. A no ser que sean naturales, tienen muchas calorías y te darán más sed.
- Después del trabajo. Si vas de terrazas pide algo de beber pero evita el picoteo dulce o salado.
- Antes de sentarte escoge bien el tipo de terraza: Si te sientas en la de una heladería o en la de alguna franquicia de batidos y cafés especiales seguro que caerás en la tentación de pedirte alguna bomba calórica