¿Qué es la acidez gástrica?
La acidez gástrica es una sensación de ardor o quemazón que se produce justo al final del esófago, algunas veces puede ir acompañada de regurgitación hacia la boca con un sabor amargo causado por los ácidos estomacales.
Las comidas copiosas, el alcohol, los analgésicos como aspirina o ibuprofeno pueden provocar o incrementar el ardor de estómago.
Cualquiera de nosotros puede ser suceptible de sufrir puntualmente ardor de estomago o acidez, si esto se convierte en algo recurrente y repetitivo se cronifica pudiendo padecer una hernia de hiato.
La acidez gástrica es recurrente en personas que llevan una dieta inadecuada dónde abunda los fritos, picantes y grasas, alcohol o tabaco.
En muchos casos con un simple cambio dieta los síntomas remiten, sin ser necesario otros tratamientos mas traumáticos.
Causas por las que se puede producir acidez gástrica:
- Problemas de cierre del esfínter esofágico
- Mayor sensibilidad de los nervios del esófago
- Gastritis
- Úlceras
- Por presencia de helicobacter pylori
Un estilo de vida saludable y una dieta equilibrada puede hacer que esta molestia desaparezca.
- Evitar las comidas con elevado contenido en grasas.
- Evitar las comidas muy condimentadas (pimienta, mostaza, vinagre, etc.).
- Evitar las carnes rojas, embutidos, la bollería industrial, leche y lácteos no desnatados.
- Evitar las comidas copiosas, comer más veces y menos cantidad.
- Comer despacio, sentado, con tiempo y masticar bien.
- Respetar el horario de las comidas y evitar el ayuno.
- Evitar las temperaturas extremas de alimentos y bebidas.
- Evitar echarse después de comer, se recomienda cenar dos o tres horas antes de ir a la cama.
- Evitar ropas ajustadas y cinturones.
¿Qué podemos hacer para evitar el reflujo o acidez gástrica?
- Evita hacer ejercicio después de comer.
- No dormir ni tumbarse después de comer.
- No beber líquidos durante las comidas, los líquidos diluyen los jugos gástricos y ralentiza la digestión.
- No hacer ejercicio inmediatamente después de comer, especialmente agacharse.
- No fumar ya que el humo puede debilitar el esfínter.
- Comer despacio masticando bien los alimentos, para que los alimentos se vayan asimilando poco a poco, también es importante no hablar mientras que se come, para evitar tragar aire mientras.
- Dormir con el cuerpo ligeramente levantado.