Comida rápida saludable. Alimentos de cuarta gama

La comida rápida saludable está muy cerca de nosotros. Las estanterías de los supermercados se han adaptado a los nuevos estilos de vida y a las demandas de las nuevas familias. Nuevos productos, más fáciles de preparar y más duraderos una vez en nuestro frigorífico.

La constumbre de nuestras madres de ir a la compra cada día, hoy es imposible, la mujer trabaja fuera de casa al mismo tiempo que ha de cuidar de la familia, llevar y traer a los niños de sus múltiples actividades y alternar socialmente. Las horas del día están contadas y programadas.

Los supermercados que son conscientes del ritmo de vida de las familias, investigan y se esfuerzan cada vez más en acercar sus productos a las amas de casa y de facilitarle la vida en lo posible, es por esto, que en los años 80, se introduce en el mercado un novedoso producto, parte de Navarra, pero su uso se extiende en poco tiempo a toda España. Estamos hablando de los productos de cuarta gama. 

De hecho, la hostelería en la actualidad se surte de este tipo de alimentos envasados, y suponen un 25 % aproximadamente del consumo total del país. A lo largo de este articulo vamos a profundizar en estas bolsas y envases llenas de frutas y verduras que solemos ver en las estanterías y de las que a veces hemos dudado; ¿son igual de frescos?, ¿qué conservantes llevan?, ¿de verdad son saludables?

¿Qué es un producto de cuarta gama?

Se trata de frutas, verduras y hortalizas de primera calidad, totalmente naturales, envasados sin aditivos ni conservantes, bajo estrictos controles de calidad y trazabilidad y con total garantía de conservación de sus nutrientes, siempre y cuando no se haya cortado la cadena de frío.

¿Qué tipo de alimentos son aptos para este tipo de envasado?

Frutas, hortalizas, semillas germinadas, hierbas aromáticas y otros vegetales de recolección.

¿Cómo podemos saber que no se ha interrumpido la cadena de frío?

Si el producto presenta signos de condensación de agua quiere decir que se ha roto la cadena de frío, por lo tanto, no debemos llevarlo a casa, sus propiedades pueden verse alteradas negativamente, no queremos decir con esto que represente un peligro para la salud, pero si, que puede haberse perdido alguno de sus nutrientes.

¿En qué tipo de envases se suele presentar los productos de cuarta gama?

El más usado es la bolsa, pero también es muy común, sobre todo para la fruta, las tarrinas rígidas trasparentes con cierre hermético.

¿Es fiable la desinfección de los productos de cuarta gama?

El lavado y desinfección es uno de los puntos más importantes a tener en cuenta para la buena conservación de este tipo de productos, lo más utilizado hasta ahora era el cloro, en su forma de ácido hipocloroso (HOCL) es barato y efectivo. Sin embargo la disociación del cloro depende del pH del agua, por lo que puede dejar residuos químicos en el medio ambiente, e incluso, formar compuestos cancerígenos, como los trihalometanos y cloraminas.

Aunque el método de limpieza y desinfección de los productos de cuarta gama va a depender mucho del tipo de alimento y sus características de oxidación al corte, en la actualidad se investigan nuevas formas de lavado y desinfección eficaces e inocuos:

• Agua electrolizada (AE), se produce mediante la aplicación de una corriente eléctrica a una solución salina.
•  El Ozono, reduce la flora microbiana en la superficie de los alimentos.
• Tratamientos térmicos por vapor de agua, que evitan los daños producidos por el frío.

¿Qué ventajas tienen los productos de cuarta gama?

• Ahorro de tiempo, al ser un producto de fácil utilización, no es necesario lavarlo ni cortarlo, por lo que incita al ama de casa a utilizarlo con más asiduidad, asegurando un consumo diario de fruta y verdura en nuestros hogares.
• Fácil transporte, por lo que resulta muy útil para llevar como merienda para los niños al colegio o como tentempié para el trabajo.
• Estricto control sanitario, por sus características, estos productos tienen un seguimiento sanitario desde su cultivo, desinfección y envasado, aportando las mayores garantías de salubridad.
• Disponible todo el año.
• Bajos en calorías, se trata de frutas y verduras, por lo que su aporte calórico es mínimo y su calidad de nutrientes máxima, contribuyendo a llevar una dieta sana.
• Ocupa poco espacio y no en ensucia la nevera.

¿Tiene alguna desventaja el consumo de alimentos de cuarta gama?

• Son algo más caros que los sus homólogos en piezas enteras.
• Algunos de estos alimentos, pueden sufrir amarilleamiento (brócoli) blanqueamiento (zanahoria) pardeamiento (lechuga), ablandamiento, que puede evitarse con la incorporación de productos químicos durante el proceso de lavado.
• Que se rompa la cadena de frío, el producto se estropearía y se acortaría su durabilidad, ha de mantenerse siempre entre 1º – 4º de temperatura.

Evidentemente siempre y cuando tengamos la posibilidad de consumir productos frescos lo vamos a agradecer, sobre todo por sabor, también porque nos aseguramos que mantienen en perfectas condiciones todas sus propiedades, sin embargo, no debemos temer estos alimentos de definición un tanto inquietante (alimentos de cuarta gama), que tienen un largo historial de consumo en paises de nuestro entorno (Francia e Inglaterra), y que no son otra cosa que frutas, verduras y hortalizas que se han adaptado a la sociedad de hoy para que puedan ser consumidas de forma cómoda (la típica ensalada ya preparada), y para hacerlas más duraderas. Comida rápida saludable que hacen mucho más fácil seguir con nuestra dieta sana y equilibrada.

¡Comparte este post si te resultó interesante! ¡Saludos!