¿Qué hacemos con tanta sal en la dieta?

El exceso de sal en nuestra dieta es uno de los puntos más fuertes en el desarrollo de enfermedades crónicas del Sistema Cardiovascular.

A pesar de las adevertencias del colectivo médico de su peligrosidad, nuestro paladar está habituado a los alimentos salados, por lo que encontramos gran dificultad en prescindir de este necesario y a la vez comprometedor condimento.

¿Por qué ponemos tanta sal en nuestros platos?

Desde el principio de los tiempos, cuando el hombre dejó de ser nómada, aprendió a conservar los alimentos, la sal fue usada como conservante.

El paladar no tuvo más remedio que acostumbrarse al sabor excesivamente salado, y así han pasado los años y los siglos y a pesar que  en la actualidad tenemos otros medios de conservación como la congelación, la atracción por los alimentos muy sabrosos es difícil de abandonar.

Industria alimentaria, sabor y sal

Ahora bien el problema del exceso de sodio en la dieta, no está tanto, en la sal que añadimos a los alimentos al cocinarlos, sino en la cantidad de sodio que ingerimos a través de los alimentos procesados industrialmente.

La sal es utilizada en la industria alimentaria como conservante en la fabricación de enlatados, pastas, masas, snacks, quesos  y otros muchos alimentos.

La industria recurre a ella para inhibir el desarrollo de bacterias, y cómo no, para realzar los sabores de los alimentos.

Normativa de etiquetado en los alimentos procesados

Las legislaciones sanitarias obligan a cumplir una normativa con respecto a la incorporación de sodio en los alimentos industrializados.

Sin embargo, pero el problema está en la suma de todos ellos, cada vez que usted toma un alimento, en su etiqueta le advierte del % del valor diario ( % del VD)  en cada porción de alimento.

Pero, ocurre que a lo largo del día se toman muchas porciones de distintos alimentos, lo que hace una suma de sodio por día insostenible para la salud.

Si a esto añadimos la sal de cocinar y la que se agrega en la mesa, estamos sobrepasando con creces la dosis máxima recomendada por día.  Según  la OMS, se debe mantener por debajo de los 5 g., al día para los adultos y de 2 g./ día para los niños.

Control del exceso de sal en la dieta

Por lo tanto, tal y como están las cosas, la solución al problema del exceso de sal en nuestra alimentación, requiere una reeducación nutricional.

Las autoridades sanitarias deberían  emprender  campañas adviertiendo que los alimentos ya tienen su propia sal y que es necesario aceptar los alimentos con su sabor original y genuino.

De esta forma, podremos evitar gran parte de las enfermedades cardiovasculares, pudiéndose llegar a salvar millones de vidas.

Consejos para reducir el exceso de sal en la dieta

Afortunadamente tenemos en el mercado una gran variedad de hierbas aromáticas y especias  que nos pueden servir de sustituto  Para cocinar platos deliciosos con todo el sabor.

Algunos consejos:

• Utilizar especias e hierbas aromáticas para condimentar.
• No poner salero en la mesa, condimentar las comidas al cocinarlas.
• Evitar los alimentos precocinados.
• Reducir la cantidad de quesos curados y fiambre en su dieta.
• Leer las etiquetas de los productos para informarse del contenido en sodio.